Garbanzos con migas de bacalao
Estos Garbanzos con migas de bacalao es una variante del clásico Potaje de Vigilia, o de Cuaresma, en el que estos dos ingredientes van acompañados de espinacas.
Sin embargo aquí hemos omitido este tipo de verdura en busca de un pequeño cambio para hacerlo más amable a quienes no gustan de las espinacas. Optamos por una cocción lenta de la legumbre, en torno a una hora, hora y pico. Ya dependerá del grado de dureza del garbanzo que, obviamente, habremos puesto en remojo desde la noche anterior. Igual ocurre con el bacalao, que hemos desalado las 24 horas anteriores como marcan los cánones: cambiando el agua cada 8 horas. El resultado es un plato exquisito, sobre todo para los que disfrutan de la cocina de cuchara.
Garbanzos con migas de bacalao
Ingredientes:
400 gr. de garbanzos (en remojo desde la noche anterior)
250 gr. de migas de bacalao (ya desaladas)
Cuatro huevos
Un tomate rallado
Una cebolla
1/2 Pimiento verde
Dos dientes de ajo
Un pimiento choricero
Una hoja de laurel
Perejil
Sal marina
Aceite de oliva
Caldo de pescado (opcional)
Preparación:
- En primer lugar ponemos los garbanzos en un caldero, con un poco de sal y perejil y los cubrimos de agua, y un poco más. Los hervimos a fuego lento durante una hora, aproximadamente. Comprobamos su dureza y los dejamos más o menos
- Entretanto, en otro caldero con aceite de oliva caliente, hacemos el sofrito rehogando la cebolla, los dientes de ajo y el pimiento, todo finamente picado. Salamos (hay que tener cuidado con la sal por si el bacalao ha retenido más de la cuenta) y lo hacemos a fuego lento
- Ponemos agua a hervir en un cazo y, cuando esté, apagamos el fuego y ponemos dentro el pimiento choricero para que hidrate bien. Lo tenemos 20 minutos ahí
- En otro cazo, hervimos los huevos. 10 minutos
- Cuando pasen los 20 minutos, sacamos el pimiento choricero del agua y le retiramos la carne con un cuchillo, raspando. Desechamos la piel.
- Volvemos al sofrito. La cebolla ya estará suficientemente pochada. Así que le añadimos el tomate, el pimiento choricero y una hoja de laurel. Y seguimos haciendo a fuego lento como quince o veinte minutos más.
- Cuando los garbanzos estén, los pasamos escurridos al caldero con el sofrito. Le añadimos algunos cucharones del caldo de cocción (al gusto si nos gusta muy o poco caldoso) y, en mi caso, he añadido también un poco de caldo de pescado casero que tenía de otras elaboraciones.
- Dejamos que hierva lentamente unos quince minutos
- Luego añadimos el bacalao y dejamos cinco minutos más. Comprobamos de sal
- Finalmente agregamos los huevos duros cortados en trocitos, apagamos el fuego y que repose hasta la hora de comer.